jueves, 5 de marzo de 2009

BARRACAS DE PIEDRA SECA


Mont-roig del Camp y las Barracas de Piedra Seca

La sobreabundancia
de piedra obligó a los agricultores a trabajar intensamente para poder obtener las superfícies necesarias para cultivar y así poder extraer de la tierra los recursos para su subsistencia. Y de esta necesidad nació la cultura de la piedra, que se materializa en todos los elementos construidos que configuran cualquier rincón de nuestro paisaje, como son las propias barracas, cisternas, cerramientos, márgenes de terrazas y bancales, etc... todas fruto del constante trabajo y el ingenio del mundo agrícola.

En Mont-roig del Camp las barracas son el tipo de refugio más característico y abundante de entre los obrados en piedra seca. Es uno de los municipios de Catalunya con más proliferación de este tipo de construcciones, ya que sobrepasan el centenar. Las barracas de piedra seca fueron construidas para satisfacer la necesidad de refugio, tanto de personas como de ganado de carga y tiro que tenían su medio de vida en el campo.

Se utilizaban tanto para resguardarse de las inclemencias meteorológicas, como para descansar al mediodía, para guardar herramientas del campo, e incluso como vivienda ocasional en tiempos de trabajo continuado en el campo. Estaban perfectamente estudiadas para evitar el calor en verano y el frío en invierno ya que, mayoritariamente, se orientan con el portal hacia el mediodía solar, para aprovechar al máximo el calor del sol, a la vez que se evita el viento del noroeste (el más habitual en nuestra comarca).

Estas barracas de rústica belleza se integran perfectamente en nuestro paisaje, pasando bastante desapercibidas. Podemos afirmar que en su construcción se funden la estética y la funcionalidad. Normalmente quienes levantaban las barracas eran los propios payeses, convertidos eventualmente en constructores. Las barracas más pequeñas podían haberse construido en un solo día, pero las más grandes podían costar hasta diez días de trabajo.

Todas ellas tienen una diversidad de estilos y formas, estando la mayoria en relativo buen estado de conservación. En el término de Mont-roig del Camp hay catalogadas actualemente 112 barracas, todas ellas declaradas Bien Cultural de Interés Municipal (febrero 2006). Para darlas a conocer el Ayuntamiento de Mont-roig del Camp ha editado un tríptico con un itinerario que propone la visita a 11 de las barracas, de diversa tipología y algunas de ellas bastante espectaculares. Este itinerario está pensado para recorrerlo en vehículo o bicicleta BTT, aunque también puede hacerse a pié.

Hoy en día, perdida la utilidad agrícola de muchas tierras y la funcionalidad de estas barracas, los derrumbes son constantes a causa de las lluvias, el paso del ganado, el viento y el transcurso del tiempo en general. Se trata de un patrimonio nada fácil de mantener aunque, afortunadamente quedan personas con sensibilidad para querer perpetuar un patrimonio que da testimonio del esfuerzo de nuestros antepasados, como es el caso de Esther Bargalló y J.M. Martí Rom y su trabajo personal hacia este tema. Cabe destacar que en los últimos tiempos se ha producido un cambio de actitud en nuestro país y ahora se valora y respeta mucho más esta herencia arquitectónica.

.Fuente: Esther Bargalló. + información: http://pedrasecamont-roig.com/

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ei convilatà, vols dir que cal traduir al castellà segons quines coses, vols dir que no entendrien Barraques de Pedra Seca.
Salut i canya.